Franz Kafka

Vivir el sueño hasta el filo que la razón lastíma
ha sembrado ansias y descontento.
Ha dejado las promesas en blasones caídos.
La tristeza navega silente,
la urdimbre laboriosa se revela.

Solo somos mientras
nos juzgan.

¿Quién comprende
las consecuencias?

Soy el sueño minúsculo que preciso
para descansar de mí.
Soy la letra que se anuda,
en agónicas sentencias tardías que nos precedieron,
muchísimo antes
de poder comprender.